ADAPTARSE?
FALLA EN NUESTRA CAPACIDAD DE ADAPTACIÓN
![Sobre la Inteligencia Humana - Cuando se ensalza la inteligencia humana comparándola con la del resto de especies animales, siempre me pregunto lo mismo: si somos tan inteligentes, ¿por qué nos pasamos la vida trabajando, y por qué el resto de animales -salvo algunas excepciones con una organización social parecida a la nuestra- son capaces de sobrevivir sin estar sometidos a la esclavitud del trabajo? [b]La respuesta no puede ser otra: porque somos más tontos.[/b] Hasta tal punto llega nuestra necedad que cuando encontramos un trabajo, en lugar de huir de él como de la peste, nos lo disputamos. Todo ello a sabiendas de que trabajar no es otra cosa que prostituir nuestro cuerpo y nuestra libertad a cambio de una generosa dosis de humillación y un mísero sustento. En mi opinión, la superioridad humana sobre el resto de especies sólo quedará demostrada cuando la esclavitud del trabajo organizado, como medio de subsistencia, desaparezca de nuestras vidas. Mientras eso no ocurra, seguiré admirando a los animales y cuestionando la tan elogiada inteligencia humana. PEDRO SERRANO - Fotolog](http://spc.fotolog.com/photo/28/14/61/miki_46/1248300456838_f.jpg)
En la coyuntura histórica por la que estamos atravesando y los constantes cambios que vivimos en el seno de nuestras sociedades, sometidos como estamos a circunstancias cambiantes de todo tipo, a la necesidad de acomodarnos a situaciones inéditas y a transitar por escenarios novedosos para la mayoría de nosotros, es cuando nuestra capacidad de adaptación se pone a prueba, siendo uno de los conceptos básicos en torno al cual gira la comprensión del funcionamiento del mundo circundante.
La capacidad de adaptación de cualquier organismo a su entorno, a nuevas circunstancias, a situaciones inesperadas, a escenarios insólitos, resulta esencial para la supervivencia de cualquier individuo.
Igualmente ocurre con la especie humana.
En psicología se da una gran importancia al concepto de adaptación.
J. Piaget, por ejemplo, considera dos aspectos opuestos y complementarios a un tiempo:
la “asimilación” o integración de las influencias externas a las propias estructuras de la persona, y
la “acomodación” al medio o transformación de las propias estructuras en función de los cambios del medio ambiente.
Evidentemente hay más o menos capacidad de adaptación en forma individual ya que la importancia del tema además de la supervivencia de la especie es importante en forma individual, siendo esta capacidad la que nos permite desarrollar en forma productiva nuestras vidas.
En algunos casos nos superan los inconvenientes y asimilamos cantidad de elementos externos sin encontrar un camino inteligente y racional para la consiguiente acomodación y es cuando comienzan los problemas... cansancio estrés, imposibilidad de abordar ciertas metas y cometidos, intolerancia y agresividad, que por cierto son las conductas aberrantes que pululan por doquier....
Somos capaces de adaptarnos a medios extremos, de realizar como sociedades cambios importantes, pero nos cuesta adaptarnos a nosotros mismos y fundamentalmente entre nosotros...
Se habla de tolerancia de comprensión pero cuesta mucho lograr un lugar racional intermedio entre dos partes... nadie quiere ceder...o casi nadie
Por eso desarrollamos estrategias en forma individual o como grupo con el propósito de cambiar el ambiente ... pero en ese ambiente están otras personas iguales a nosotros que también pueden intentar lo mismo y curiosamente nosotros somos el problema para ellos...
La estrategia más común en estos días es el individualismo puro, el egoísmo marcado e indiferente que también puede ser un signo de adaptación personal pero ¡que inútil para toda la sociedad..!
otra forma que sería interesante estudiar es como delegamos responsabilidades en otros y luego por supuesto les exigimos si no cumplen los propósitos para los cuales fueron asignados ya sea en ámbitos empresariales, familiares, políticos e incluso, y esto es lo más lastimoso, emocionales.
Son ellos los que tienen que realizar los cambios.
¿Estamos preparados para los cambios? ¿Lo único cierto es que hay cambios?
Quizás generaciones anteriores tenían mayores certezas y era más fácil actuar en concordancia.
Hoy en día ya no es así, y tampoco existe una escuela que nos eduque.
El camino es difícil pero hay que andarlo sin dudas... para luego adaptarse a otros cambios...
Si en estos momentos no podemos contra ellos entonces:
¡¡ cambiemos a los cambios!!
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